[ad_1]
Por Leo Babauta
Muchas de nuestras dificultades pueden estar enredadas con nuestra autoestima, ya sea cuidándonos con buenos hábitos, cómo nos va en las relaciones o qué tan seguros estamos en el trabajo.
Piensa en tus mayores dificultades (aparte de los problemas a nivel nacional o mundial)… ¿cuántas de ellas podrían resolverse si tuvieras una fe inquebrantable en tu autoestima? ¿Cuando te sientes completo, completo e increíblemente valioso?
Podría crear su creación con confianza y sacarla al mundo e incluso comercializarla a otros.
Podrías iniciar un negocio o negocio, iniciar una organización para servir a otros, enseñar algo que te importe.
Podrías hablar con confianza en público, presentar tus ideas, defenderte. Podrías establecer límites, expresar tus necesidades, cuidar de ti mismo.
Todo proviene de un fuerte sentido de uno mismo.
Pero se nos enseña desde pequeños a sacar nuestra autoestima del exterior:
- Elogio o validación de otros.
- Me gusta y comentarios para confirmarnos en las redes sociales.
- Logros, premios, recompensas
- Éxito, riqueza, una casa hermosa, cosas hermosas.
- Ropa bonita, cosas que nos hacen sentir atractivos o geniales.
- Sexo, atracción de pareja, interés o atención de los demás.
- Las personas que quieren pasar tiempo con nosotros muestran interés en nosotros
Etc. El problema con este tipo de validación externa de nuestro valor es que es fugaz. A veces lo conseguimos y nos sentimos bien con nosotros mismos, y muchas veces no lo conseguimos y nos sentimos desanimados, rechazados y miserables. Y luego buscaremos más la validación externa porque eso es lo que sabemos hacer cuando necesitamos sentirnos mejor.
Entonces, ¿qué podemos hacer? Podemos tratar de encontrar nuestra autoestima desde adentro.
Esto puede ser toda una vida de exploración, pero algunos lugares para buscar:
- Nota lo bueno en tu corazón
- Ten compasión de ti mismo cuando tengas dificultades
- Sea curioso acerca de usted mismo
- Trata de notar tu determinación, perseverancia y dedicación.
- Vea si puede encontrar su sentido del juego, la alegría y la maravilla.
- Aprecia cómo aprecias las cosas
- Pasa tiempo contigo mismo y presta atención a cómo te sientes.
- Da amor a ti mismo y a los demás y aprecia el amor que viene de ti.
- Sumérgete en un acto, dalo todo de ti mismo y aprecia eso también
- Siga regresando a un proyecto o intente cambiar sus hábitos incluso si se aleja.
- Escribe un diario, piensa, piensa, medita, encuentra tiempo para el descanso y la quietud.
- Ve a un retiro de meditación y explora tu yo interior
- Encuentre maneras de expresar su alegría, divinidad, juego, curiosidad y más
- Reconoce la abundancia de amor que tienes.
- Maravíllate de quién eres en cada momento
Algunos de estos pueden ser desafiantes, ¡está bien! Observe cómo responde a los desafíos y asómbrese también en eso. Sigue explorando, trae curiosidad, trae asombro y amor.
¿Qué tal tener siempre una rica autoestima?